Los días 14 y 15 de julio, el IDEPA organizó una sesión de debate y reflexión virtual, bajo el título "Cómo nos imaginamos Asturias en un futuro. Contribución de la industria a la salud y a la calidad de vida.
Con esta reunión se pretende de crear nuevas oportunidades del sector de salud de futuro en los sectores biosanitario, agroalimentación y la industria tras los últimos acontecimientos con la COVID-19 pues la salud se ha impuesto como uno de los retos más urgentes.
En la reunión intervino la directora general del IDEPA, Eva Pando, quien participó en el Co-Working, y agradeció la implicación de los asistentes y su compromiso, igualmente, insistió en que "nos atrevemos a seguir innovando", por ello, "era necesario probar una metodología para algo que nos parecía muy importante, con todo lo que hemos vivido con la COVID-19. Sin duda, la salud es un reto en nuestra estrategia de especialización y abordar como hibridar temas tan distintos, como la salud, vinculada a la alimentación, al turismo, a la agricultura o a la industria es muy importante para todos".
También participaron diferentes empresas y entidades de nuestra región a través de un programa innovador.
En la actualidad, se presenta una necesidad de instaurar nuevas fórmulas que ayuden a desarrollar y establecer escenarios de futuro óptimos, en materia de salud ligado, a la alimentación e la industria. Asimismo, la sistemática del Co-Working utilizada trataba de alcanzar acuerdos imaginando escenarios futuros óptimos. Por ello, desde el punto de vista económico y con las lecciones aprendidas sobre la COVID-19, IDEPA eligió 3 tipos de retos para desarrollar en este encuentro: el sector biosanitario local estratégico, la orientación del sector agroalimentario al mercado de la salud y una industria adaptada a las capacidades de las personas.
Con todo ello, IDEPA logró congregar a un grupo de expertos, multidisciplinar de alto nivel con representantes de agentes sociales, empresas tractoras, Pymes, políticas regionales e investigadores científicos y tecnológicos que fueron divididos en tres grupos de trabajo. De esta forma, los distintos grupos trabajaron, apostando por el desarrollo de ideas que establecían nuevos enfoques y perspectivas de futuro.
Sector biosanitario local
Los participantes vieron la oportunidad en convertir Asturias en un paraíso natural de nutrición y salud, combinando la tecnología con el turismo de salud. También incidieron en la importancia de la existencia de un sistema sanitario reconocido a todos los niveles con el HUCA y la FINBA a la cabeza. Y todos estuvieron muy de acuerdo en la necesidad de consolidar el conocimiento científico y tecnológico en salud coordinando distintas fuentes como universidad, centros I+D+i y empresas tractoras.
Reto especializado en salud y sector agroalimentario
Se plasmó la necesidad de identificar con claridad cadenas de valor regionales y promover simultáneamente la transformación artesanal e industrial. Se consideró que las Pymes precisan ilustración en el mercado de la salud y disponer de espacios de demostración para favorecer la absorción de tecnología. Además, dada la competitividad de los mercados internacionales en los que opera la gran industria láctea, se estima indispensable ahondar en el desarrollo de tecnologías de vanguardia para incorporar salud a todas las fracciones.
Reto de adaptar la industria a las necesidades del trabajador
Se puso en valor el talento y las necesidades vitales en los distintos colectivos generacionales desde jóvenes a seniors, echando de menos espacios constructivos público privados para consensuar capacidades y objetivos profesionales individuales y colectivos. Por ello, se llega a la conclusión de que las tecnologías como la simulación, pueden mejorar la eficiencia de los procesos y acelerar respuestas ante emergencias. Asturias, cuenta con una importante dotación infraestructuras de telecomunicación que se deben explotar como ventaja competitiva.
Finalmente, en todos los retos se puso de manifiesto la necesidad de avanzar alineando a objetivos e iniciativas europeas para aliviar también las rigideces normativas y legales que a veces limitan el desarrollo de la actividad. Igualmente, el programa utilizado para el desarrollo de la actividad Co-Working digital fue muy bien acogido por todos los participantes, por la facilidad mostrada para intercambiar opiniones, reflexiones e ideas, con personas de distintos sectores y ámbitos.