A pesar de que haya contenedores para que los ciudadanos y las empresas reciclen la basura que generan, todavía se siguen colando toneladas de plástico, papel o vidrio, entre otras, en el de la bolsa negra. Es un problema al que cuesta hacer frente porque no es algo que esté al alcance de las entidades recicladoras ya que, por lo general, sucede de manera más particular y sobre todo dentro de los hogares.
¿Qué se hace en Asturias con la basura que no es susceptible de ser reciclada? Cogersa es la entidad encargada de recolectar todos los residuos, sean o no reciclables y darles una nueva vida o enterrarlos. Sin embargo, vieron que la dificultad residía en poder hacer algo para separarlos.
Así surgió el proyecto de la planta de tratamiento de la fracción resto, cuyas obras arrancaron en julio de 2021 y su inauguración tuvo lugar ayer en Serín, aunque ya lleva un tiempo en funcionamiento. Para estas instalaciones se invirtieron 62,5 millones de euros financiados con fondos propios, y permitirán aumentar la tasa de reciclaje de desechos al 50%, la cual está actualmente en el 24%. Al acto, que incluyó una visita guiada para conocer la planta, acudió el presidente del Principado, Adrián Barbón; la consejera de Transición Ecológica y presidenta de Cogersa, Nieves Roqueñí; el presidente de la Junta General del Principado, Juan Cofiño o la gerente del Consorcio, Paz Orvíz, entre otros.
“Esta planta es la rampa de salida para el despegue de la economía circular en Asturias, de lo que hablaremos cada vez más los próximos años” dijo Barbón. Y es que se trata, como apuntó Roqueñí, de “la más moderna de España, con un alto nivel de recuperación, robustez y automatización, que situará a Asturias en la senda del cumplimiento de los objetivos de reciclaje que nos marca la legislación europea”.
Sartenes y deportivas
Las enormes instalaciones destinadas a la planta de tratamiento de la fracción resto alberga alrededor de 60 empleados que trabajan insistentemente en aras de la separación más minuciosa de residuos.
Se ve pasar por las largas cintas transportadoras material de todo tipo, desde artículos más comunes de plástico o cartón hasta sartenes o deportivas. Alrededor de un tercio de las 450.000 toneladas que llegan se convierte en Combustible Sólido Recuperado (CSR), que se aglutina en pacas y que «requiere un tratamiento adicional que aún no tenemos en Cogersa y que se definirá en el Plan Integrado de Residuos para una Economía Circular 2025-2030», tal y como explicó Nieves. Por tanto el futuro de esas pacas sigue en el aire.
El tratamiento del que hablaba la presidenta de Cogersa se traducirá en un coste adicional para los ciudadanos, por eso Barbón recuerda que se debe “reciclar más para pagar menos”.
A tenor de esa concienciación, el presidente del Principado puso un ejemplo tradicional: “Antes, al menos hace unos años, había una frase muy recurrente en la inmensa mayoría de las familias que nos decían nuestras abuelas: ‘Aquí no se tira nada’. Había la necesidad material, incluso ética, de sacarle el máximo provecho a todo, a la comida, a la ropa, a los libros de texto, hasta a los cuadernos con pocas hojas escritas... Tengámosla presente cuando pensemos en esta planta. Aquí, en Cogersa, no se tira nada. Se aprovecha todo, y nuestra obligación institucional y ciudadana es ponérselo más fácil, lo más fácil posible”.