Avilés conjuga innovación con tradición industrial

Construir un ecosistema innovador sólido y disruptivo como el de Avilés no es casualidad: se necesita tiempo, perseverancia, visión de futuro y voluntad. La economía de la ciudad y su comarca han estado fuertemente unidas a su puerto y a la industria desde el siglo XIX. Al igual que ocurriera con otras regiones de Europa, Avilés ha sufrido un potente proceso de reindustrialización ligado a la innovación y la sostenibilidad. 

En la actualidad, cuenta con un número importante de empresas relacionadas con el ámbito de la ingeniería y la oferta de bienes y servicios para el sector del acero, las energías renovables, el Oil & Gas y el petroquímico. En las fábricas de Avilés se producen desde grandes recipientes a presión, hasta torres de acero de alta resistencia para la energía eólica marina para clientes de todo el mundo. Hablamos de grandes compañías como IDESA, Asturfeito, Fertiberia o Windar que ejercen un efecto tractor sobre el conjunto del tejido empresarial avilesino y que han favorecido la aparición de empresas relacionadas con las nuevas tecnologías como la fabricación aditiva o la inteligencia artificial.

Avilés también alberga uno de los centros más avanzados de investigación tecnológica en acero y nuevos materiales y dos centros de I+D, de los 16 que tiene en el mundo ArcelorMittal. También ha sido capaz de atraer a grandes empresas del sector tecnológico como DXC Technology o SATEC, completando así la apuesta de la ciudad por la industria del futuro.

Todo ello conforma la iniciativa del Parque Científico Tecnológico Avilés Isla de la Innovación, un verdadero ecosistema innovador en el que conviven y cooperan empresas industriales y centros de investigación, impulsados por un capital humano de talento y excelencia, que aúna esfuerzos para abordar retos y oportunidades comunes.

Corazón industrial e investigador

Avanzando desde la tradición industrial hacia la vanguardia de la innovación, Avilés se encuentra en pleno proceso de transformación productiva, aspirando a liderar un nuevo modelo basado en el conocimiento y la innovación. 

No obstante, destaca su importante sector industrial que, trabajando con la innovación y la excelencia como referencia, alcanzan el 30% de su valor añadido bruto. El 71,6% de los empleos en Avilés están asociados al sector servicios, seguido por el sector industrial, que sostiene el 21,6% del empleo avilesino. En concreto, la metalurgia y los productos metálicos abarcan más del 13,65% de los empleos en Avilés sumado al 2,5% también dedicado a la industria transformadora de los metales, hace del sector industrial uno de los más destacados de la comarca avilesina.

“Queremos que haya industria, queremos seguir siendo la mayor mancha industrial de España y la principal concentración de multinacionales de Europa. Debemos seguir  innovando en el ámbito de los materiales, de la fabricación de bienes de equipo”, afirma Manuel Campa, concejal de Desarrollo Urbano y Económico del Ayuntamiento de Avilés.

La Manzana del Acero, un proyecto impulsado por el Centro de I+D New Frontier de ArcelorMittal y el Centro Tecnológico IDONIAL, es una infraestructura de I+D+i clave y singular. Aglutina a más de 200 investigadores y constituye un núcleo tecnológico de referencia a nivel mundial en el desarrollo de nuevos aceros, procesos y soluciones para empresas manufactureras y transformadoras en base de acero. Las quince plantas piloto que la componen y que reproducen todos los procesos de transformación del acero, gozan de plena autonomía, lo que permite desarrollar proyectos que impliquen a todas ellas o solo a una parte, así como probar y desarrollar todas las tecnologías relacionadas con la digitalización industrial. 

Otro punto a destacar de Avilés es la capacidad de colaboración entre empresas, administración, centros tecnológicos y universidad. Ejemplo de esta cooperación son los espacios que el Ayuntamiento de Avilés pone a disposición de los emprendedores. El Espacio Maqua y el Centro de Empresas de La Curtidora se posicionan como espacios de innovación para nuevas iniciativas empresariales. Además, a través de su servicio Avilés Empresas, la ciudad acompaña a los emprendedores ofreciendo un servicio integral de información, orientación, asesoramiento y apoyo tanto durante el proceso inicial de puesta en marcha como el de consolidación de su iniciativa empresarial.

Avilés se posiciona así como un ecosistema ideal para atraer inversiones de empresas gracias a su fuerte industria centrada en la innovación y la sostenibilidad, los diferentes centros de I+D, una población tecnológicamente preparada y una administración ágil y facilitadora.

Las claves de los protagonistas

"Estamos en constante transformación. No sólo desarrollaremos proyectos de I+D, sino que vamos a hacer un programa de innovación abierta y de emprendimiento".

"Trabajamos en inteligencia artificial aplicada al funcionamiento de las redes y sus servicios. También, con IA, en un sistema para sanidad que analiza qué enfermedades se están produciendo, dónde van los pacientes, a qué hospitales...".

"Hace falta innovar más, es una de las palancas que tenemos para generar riqueza y prosperidad en el territorio".

"Nos hemos adaptado de forma natural a sectores como el metalmecánico, siderúrgico y refractario. Colaboramos especialemente con pymes y les ayudamos a mejorar sus productos y procesos con tecnologías de transformación. Les ayudamos a impulsar su innovación".

"Nos hemos especializado en la mejora de los procesos hidrometalúrgicos y en el desarrollo de nuevos equipos para las instalaciones de Asturiana de Zinc".

"Estamos a la búsqueda de talento de forma continuada y, a veces, hay dificultades para incorporarlo. Se debería lograr una mejor conexión entre las universidades y las necesidades que nosotros tenemos en los centros tecnológicos".

"Tenemos unos 280 investigadores en Asturias y hemos hecho inversiones por más de 150 mill €. Nuestra innovación tiene un gran impacto positivo en la sociedad asturiana".

"Entre todos, debemos contribuir a la formación de los estudiantes y a fomentar proyectos conjuntos para facilitar la madurez de los profesionales y así atraer y tener una calidad de trabajo en ArcelorMittal cada vez mejor".

"Arrancamos en 2020 y ahora somos más de 20 trabajadores dedicados a la mejora de los procesos de fabricación, el impulso de la digitalización, la ingeniería de producto y todo lo que tenga que ver con circularidad y sostenibilidad en Windar".

"Hemos sido capaces de digitalizar de forma completa una de nuestras fábricas. Esto nos permite tener un control completo del proceso productivo como del personal".

"Somos 17 personas en el centro de I+D con distintos perfiles de ingeniería. Ponemos el foco en la digitalización de los productos y procesos".

"Debemos buscar sinergias, somos muy complementarios, la colaboración entre empresas industriales es muy factible. A esto se le suman los grupos de investigación de la universidad, las startups, las empresas innovadoras… la ecuación está ahí y no es difícil de resolver".

"Diseñamos estructuras para plantas fotovoltaicas. Somos cerca de 150 personas en el grupo y nuestras instalaciones están en Avilés, dónde hacemos la ingeniería, el desarrollo de I+D y la fabricación".

"Asturias tiene la suerte de contar con el acero y buenas escuelas de ingeniería. Esa mezcla, junto con los centros de I+D, es un arma muy poderosa. Tenemos que ayudarnos entre todos y sacar más productos".

"Estamos trabajando en la digitalización de nuestras plantas y en el análisis y aprovechamiento de los datos. También estamos buscando nuevas formas de crecer mediante nuevos sectores, mercados y tecnologías".

"La sostenibilidad y la eficiencia energética son importantes, ahora mismo estamos en un proyecto que monitoriza los consumos eléctricos y de gas en la planta que tenemos en el Polígono Maqua".

"Somos 21 personas y nuestra actividad está orientada a la mejora de nuestros procesos productivos y a adaptarnos a los nuevos mercados, principalmente a los de la transición energética".

"Estamos inmersos en proyectos de almacenamiento de hidrógeno verde y en proyectos de captura de CO2. En los últimos años hemos virado hacia los nuevos productos de la transición energética y para eso ha sido muy importante la I+D".