Conectar a las personas y a las entidades ha sido siempre, y es, uno de los grandes objetivos del Club de Calidad. Es por eso que entre sus planes anuales están siempre las iniciativas que fomentan la conectividad entre empresas con potencial tractor y el tejido empresarial local. En este sentido, han implementado la propuesta Gijón: Redes Empresariales con la ayuda del Ayuntamiento de Gijón a través de Gijón Impulsa. La actividad ha consistido en tres sesiones de intercambio entre diferentes entidades en un tono de innovación abierta.
Estas sesiones buscan generar sinergias y colaboraciones que permitan identificar y abordar las principales necesidades de las empresas tractoras, al mismo tiempo que se promueve el conocimiento de las capacidades y soluciones del ecosistema empresarial gijonés. El objetivo es crear oportunidades de negocio para las pequeñas empresas y fortalecer el entorno corporativo, contribuyendo al bienestar social y económico del municipio.
Más de una década llevan el Club de Calidad y el Ayuntamiento de Gijón trabajando juntos en el desarrollo de proyectos que refuerzan el tejido empresarial local. Gracias a este trabajo en conjunto se han llevado a cabo 12 iniciativas en las que han participado más de 80 organizaciones, impulsando la innovación, la competitividad y la sostenibilidad en el ecosistema empresarial asturiano, como Gijón Paraíso Circular, Green Gijón, Gijón Huella de Carbono, Gijón Ecodiseña, Gijón Gestión Avanzada o este, Gijón: Redes Empresariales, desarrollado en el marco de la convocatoria 2024 de ‘Incentivos al ecosistema emprendedor de Gijón’.
Luis Díaz, director gerente de Gijón Impulsa, considera que “el apoyo a iniciativas como esta demuestra nuestro compromiso con el fortalecimiento del ecosistema emprendedor local. Creemos en la colaboración público-privada como una herramienta clave para el crecimiento sostenible de nuestras empresas”. Por su parte, el presidente del Club de Calidad, Jesús Daniel Salas, asegura que con esta colaboración “hemos fomentado la cooperación, la excelencia y la sostenibilidad entre empresas del municipio, facilitando el crecimiento y la innovación en un entorno de mejora continua”.

Criterio de Gobernanza
La primera de las sesiones tuvo lugar el pasado 16 de enero en el Edificio Gijón Impulsa -donde también se celebraron las demás- y giró en torno al intercambio de experiencias desde un criterio de gobernanza. En este encuentro, empresas como la Fundación Hospital de Jove, Grupo TSK y Grupo Mota compartieron sus avances en la digitalización de documentación y la automatización de procesos administrativos y de producción.
En la sesión se identificaron desafíos comunes a las tres entidades, como la interoperabilidad de sistemas, la gestión de datos en tiempo real y la aplicación de nuevas tecnologías, incluyendo inteligencia artificial. Asimismo, se puso de manifiesto la necesidad de optimizar recursos mediante plataformas integradas que permitan mejorar la gestión y trazabilidad de información relevante.
Por ejemplo, el Grupo Mota contempla como prioridad la implementación de una plataforma o herramienta que facilite el acceso a datos clave sobre sus vehículos, y por ello ya han invertido en tacógrafos digitales.
Por su parte, la Fundación Hospital Jove está centrada en encontrar soluciones informáticas que permitan ordenar, tratar e integrar la información generada en sus distintas herramientas ya implantadas. Además, la ciberseguridad es un aspecto crucial para ellos, dada la sensibilidad de los datos de los pacientes.
Para TSK, el foco actual está en la aplicación de la inteligencia artificial a sus procesos, ya que previamente han realizado un trabajo significativo en automatización que les permite avanzar en este sentido. En esta línea, la organización desarrolla distintos tipos de robots y trabaja en el programa SITETRACK (fotografías 360º), con el objetivo de monitorizar el estado de las plantas de trabajo y detectar posibles desviaciones de forma temprana.
Criterio Social
La segunda sesión se celebró el 6 de febrero y estuvo centrada en el ámbito social, con el foco puesto en la mejora del bienestar laboral y la gestión del talento. En ella participaron Caja Rural de Asturias, Banco Sabadell, TotalEnergies y Seresco, que compartieron diversas iniciativas destinadas a fortalecer la cultura organizativa, como encuestas de clima laboral, programas de salud integral y estrategias de conciliación. También se resaltó la importancia de la escucha activa de los empleados y la comunicación interna efectiva como pilares fundamentales para el desarrollo de un entorno de trabajo saludable y productivo. La flexibilidad laboral, la digitalización de procesos de recursos humanos y el desarrollo de planes de formación y crecimiento profesional fueron otros aspectos clave abordados.
Banco Sabadell trabaja en la iniciativa ‘Bienestar y Salud 360º’, que entiende la salud como un estado completo de equilibrio físico, mental y social, y no solo como la ausencia de enfermedades.
En el caso de Seresco, su estrategia se enfoca en construir un entorno inclusivo, seguro y saludable, promoviendo la conciliación, la flexibilidad horaria, el trabajo híbrido y la retribución flexible, además de impulsar planes de formación y desarrollo profesional.
TotalEnergies, por su parte, ha implantado medidas como la certificación EFR (equilibrio, flexibilidad y responsabilidad), la comunicación interna a través de vídeos informativos del CEO tras cada Comité de Dirección y un informe anual en el que se detalla la propuesta de valor total generada para los empleados.
Caja Rural de Asturias también ha puesto en marcha diversas acciones, como programas de apoyo psicológico, mindfulness y bienestar emocional, así como estrategias para adaptarse a nuevas formas de trabajo mediante políticas de trabajo híbrido. Asimismo, promueve hábitos saludables con planes de nutrición, deporte y creación de espacios saludables.
Criterio Ambiental
En la tercera y última reunión, centrada en el criterio ambiental, participaron Ence Energía y Celulosa, Isastur y Grupo Lacera, que expusieron sus iniciativas para reducir la huella ambiental y mejorar la eficiencia energética, especialmente en relación con la reducción de emisiones de CO2 y la optimización de recursos en sus procesos.

Lacera se ha marcado como meta disminuir su impacto en términos de emisiones y consumo de agua, detectando que la mayor parte proviene de las labores de limpieza e higiene y de sanidad ambiental. Para ello, han implantado medidas como la sustitución de vehículos de combustión por modelos híbridos o eléctricos, el uso de productos concentrados que requieren menos transporte y la mejora de técnicas de limpieza mediante nebulización y pulverización. Además, han incorporado maquinaria con sistemas de reutilización de agua que permiten reducir hasta un 50% el consumo diario.
Por su parte, Isastur se enfrenta al reto de mejorar su eficiencia energética, optimizar procesos industriales y lograr una mayor aceptación social en torno a sus operaciones. Otro de sus objetivos es la sostenibilidad hídrica, garantizando el acceso al agua tanto para el consumo humano como para el uso agrícola e industrial.
Y Ence Energía y Celulosa ha definido una serie de metas alineadas con los ODS, implementando acciones para mitigar el cambio climático, impulsar productos de celulosa de origen natural sustitutivos de plásticos, fomentar la economía circular e impulsar una gestión forestal sostenible. Dos de sus mayores compromisos en materia ambiental son el uso eficiente del agua y la descarbonización, para los que han impulsado importantes inversiones en su biofábrica de Navia, además de aplicar la mejora continua en todos sus procesos.