La pandemia económica y laboral que estás asolando el tejido empresarial está siendo tan cruenta como la sanitaria. Las empresas, tanto micro, pymes, medianas y grandes empresas están revisando sus previsiones de ingresos a la baja de manera notable, y la consecuencia directa es el aumento del desempleo.
Además, con un ecosistema empresarial formado en su mayor parte por micro-pymes y que de éstas la gran mayoría van económicamente al día, se enfrentan en una situación de gran debilidad al efecto del cierre o bajada notable de los ingresos, con escasa respuesta financiera y con un problema grave de hacer frente a los pagos a proveedores, salarios, cotizaciones sociales, impuestos, alquileres, seguros y créditos.
Las medidas que ha tomado el Gobierno Central no ayudan a dar estabilidad al sector, sino todo lo contrario, ya que crean incertidumbre y una enorme preocupación en los empresarios. No dan ayudas a afrontar los pagos, sino que dan avales para aumentar el endeudamiento, pero no van al problema principal, que es cuadrar la tesorería, antes que los ingresos y gastos, sino que darte facilidades para seguir pagando.
Las empresas, con objeto de reducir los costes fijos y adaptarse de forma inmediata a la bajada de ingresos que la gran mayoría ya han notado, optan por no renovar los contratos laborales temporales y hacer despidos masivos.
Para una empresa, por duro que sea, es bastante mejor situación despedir a una parte de la plantilla y salvar al resto, que cerrar y despedirlos a todos.
Pero hay un grupo de empresas que contradicen la tónica general y que están en la situación inversa, que en medio de la tempestad, la capean y siguen generando riqueza. Las empresas que prestan servicios jurídicos, financieros y laborales están a pleno rendimiento a pesar del confinamiento de la población.
Pero si hay un grupo de empresas que siguen captando talento y creando empleo son las tecnológicas a pesar del temporal. Antes del confinamiento de la población, en el sector había pleno empleo, y no había profesionales suficientes para cubrir la demanda. Las empresas tecnológicas tenían que rechazar proyectos por no tener equipo humano suficiente para desarrollarlo, no había recién titulados suficientes estudiantes para cubrir las necesidades y les siguen pasando lo mismo.
Con esta crisis súbita, el mercado de las tecnológicas está cambiando como cambia el de todas las empresas y todos los sectores. La industria manufacturera contendrá a corto plazo las inversiones muy fuertes en transformación digital pero seguirá digitalizando procesos y haciendo mejoras continuas, porque es lo que han hecho siempre las fábricas que han crecido, que es optimizar constantemente sus procesos para mejorar el rendimiento interno y la productividad.
Es cierto que hay sectores productivos que están decayendo con muchas fábricas cerradas, principalmente los más tradicionales, pero la industria alimentaria y el agroalimentario está a tope. Y si están a tope, es más sencillo automatizar procesos e integrar la tecnología para mejorar, para robotizar y para dar respuesta a la demanda, y ese es el mercado de las tecnológicas.
Además, el confinamiento ha disparado el consumo digital de todo tipo de contenidos de entretenimiento personal, así como multitud de herramientas tecnológicas de teletrabajo están siendo usadas masivamente y por tanto, la industria tecnológica y telecomunicación tiene que dar respuesta a las nuevas necesidades de los nuevos consumidos, por lo que necesitan recursos y personal.
Un área de las empresas tecnológicas que se verá muy reforzada serán todos los servicios de ciberseguridad. Estos días se han disparado los ciberataques sobre los distintos sistemas públicos, así como multitud de empresas por la vulnerabilidad del teletrabajo, y las tecnológicas están reforzando los departamentos de ciberseguridad para dar respuesta a esta demanda de sus servicios.
No es casualidad que las empresas tecnológicas copen la escasa demanda de empleo de los conocidos portales de empleo generalistas que hay en la red con todo tipo de demanda de perfiles relacionados con el desarrollo tecnológico.
En medio de la tempestad de esta súbita crisis, en la que miles de empresas están abocadas al cierre, que llena de incertidumbre los corazones de los más inteligentes y aventajados empresarios, las tecnológicas siguen liderando, siguen por delante en la transformación digital de la industria, del tejido empresarial y de la sociedad en general, y siguen creando empleo y por tanto riqueza y aportando al sistema de bienestar.