La financiación apoyará diez proyectos medioambientales y climáticos a gran escala en nueve Estados miembros, ayudando así a la transición de Europa hacia una economía sostenible y la neutralidad climática. Estos proyectos se llevarán a cabo en Chequia, Estonia, Irlanda, Grecia, España, Francia, Chipre, Letonia y Eslovaquia.
Frans Timmermans, vicepresidente ejecutivo de la Comisión Europea, ha declarado lo siguiente: «El Pacto Verde Europeo está concebido para mejorar el bienestar y la prosperidad de nuestros ciudadanos, protegiendo al mismo tiempo la naturaleza y el clima. Durante años, los proyectos LIFE han desempeñado un papel importante y han tenido un gran impacto sobre el terreno. Con la inversión de 100 millones EUR anunciada hoy contribuiremos a conservar valiosos hábitats naturales, a mantener el aire limpio y a reducir la contaminación en muchos lagos y ríos de Europa».
Virginijus Sinkevičius, comisario de Medio Ambiente, Océanos y Pesca, ha declarado lo siguiente: «Los proyectos integrados LIFE permiten a las autoridades de los Estados hacer que se sienta de verdad la diferencia en el medio ambiente y en la vida de las personas. Estos proyectos ayudarán a los Estados miembros a conservar la naturaleza, mejorar la calidad del aire y del agua y hacer que la economía sea más verde. De ese modo, mejorará nuestra resiliencia ante un clima cambiante».
Los proyectos integrados mejoran la calidad de vida de los ciudadanos al ayudar a los Estados miembros a cumplir la legislación de la UE en seis ámbitos: naturaleza, agua, aire, residuos, mitigación del cambio climático y adaptación a este. Además, apoyan la aplicación de la legislación medioambiental y climática de manera coordinada y a gran escala territorial, aprovechando la financiación procedente de otras fuentes de la UE, los agentes nacionales y regionales y los inversores privados.
Fondos complemenntarios
Se prevé que las inversiones del programa LIFE movilicen más de 6 500 millones EUR de fondos complementarios, ya que los Estados miembros también pueden utilizar otras fuentes de financiación de la UE, incluidos los fondos agrícolas, regionales y estructurales, Horizonte 2020, los fondos nacionales y la inversión del sector privado.
Los proyectos a gran escala apoyarán el Pacto Verde Europeo y la ambición de la UE de convertirse en el primer continente climáticamente neutro de aquí a 2050. También ayudarán a restaurar y a conservar los ecosistemas y las especies de los que todos dependemos, a avanzar hacia una economía circular, a mejorar la calidad del aire y del agua, a impulsar las finanzas sostenibles y a aumentar la resiliencia frente al cambio climático en Europa.
Impacto sobre el terreno
- Conservación de la naturaleza: Los proyectos integrados en Estonia, Irlanda y Chipre contribuirán a conservar la naturaleza europea y a mejorar la gestión de la red de espacios protegidos de la UE Natura 2000. Muchos hábitats y especies importantes se beneficiarán de ello; desde los bosques, las tierras agrícolas, los pastizales, las zonas costeras y las turberas hasta las especies polinizadoras. Estos hábitats también sirven como valiosos sumideros de carbono.
- Gestión de residuos: Un proyecto en Grecia promoverá la prevención y la reutilización de residuos, reduciendo la cantidad de residuos municipales que acaban en vertederos. Se elaborarán nuevos indicadores y normas sobre residuos para contribuir a implantar la economía circular.
- Calidad del aire: La financiación de LIFE contribuirá a que Eslovaquia cumpla las Directivas de la UE en materia de calidad del aire, reduciendo la exposición de la población a contaminantes atmosféricos nocivos. La vecina República Checa, afectada por problemas similares de calidad del aire, también se beneficiará de ello.
- Agua: Los proyectos integrados cuyo objetivo sean las cuencas fluviales protegerán y mejorarán la calidad del agua en los ríos y los lagos de Irlanda y Letonia, lo que permitirá a estos países cumplir sus obligaciones con arreglo a la Directiva marco de la UE sobre el agua.
- Adaptación al cambio climático: La financiación en el marco de LIFE también dará apoyo al aumento de la resiliencia ante el cambio climático. Los proyectos integrarán la adaptación al cambio climático en la planificación y en otros ámbitos estratégicos en España, y fomentarán la capacidad de adaptación en Francia con soluciones basadas en la naturaleza.