La compra pública de innovación (CPI) es una estrategia gubernamental que implica la adquisición de bienes y servicios innovadores por parte de entidades públicas para satisfacer sus necesidades y, al mismo tiempo, estimular la innovación en el sector privado.
La Iniciativa Estratégica de Compra Pública de Innovación (IECPI) del Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE) está dotada con un presupuesto global de 224 millones de euros, en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) con la financiación de los Next Generation EU.
Ayer, Enrique Berdayes, director de operaciones y coordinador general del programa de innovación de Treelogic, una empresa pyme que apuesta por el I+D como elemento diferencial, explicó de qué modo participan en dicha iniciativa de INCIBE.
El encuentro, organizado por la propia compañía en colaboración con Cluster TIC y que tuvo lugar en el AS5-HUB, sirvió para conocer los seis proyectos de la pyme elegidos por el Instituto para desarrollar en aras de mejorar la ciberseguridad.
Para empezar, Berdayes quiso poner en valor las ventajas que aportan este tipo de iniciativas: “Nos hacen competir por el talento, nos obligan a estar en alineamiento con prioridades europeas y globales de innovación y nos ayudan a colaborar con empresas y organismos de investigación o con administraciones públicas”.
Treelogic ha desarrollado 25 proyectos centrados en salud, industria, energía y seguridad. De ellos, seis se han enfocado en la ciberseguridad, y esos fueron los que le plantearon a INCIBE en sus tres convocatorias.
Los resultados obtenidos fueron “un total de 55 profesionales involucrados en los proyectos, 30 nuevos contratos, 9.8 millones de euros, cuatro subcontratas y 16 usuarios finales implicados que pudieran valorarlos”, detalló Enrique Berdayes.
Para cada reto, una solución
En la primera convocatoria, INCIBE planteaba retos en cuanto a la gestión de identidad, las criptotransacciones y la protección de datos.
Las soluciones que aportó Treelogic fueron: para la gestión de identidad, IBERIA, “un proyecto centrado en los registros distribuidos y la inteligencia artificial”; para las criptotransacciones, CRYPTOTRAX, “sistema basado en la monitorización para la detección de actividades ilícitas”; y para la protección de datos, APRENDE, “que persigue la protección y privacidad de los datos en entornos federados”.
En esta primera fase también propusieron una serie de actividades adicionales como establecer acuerdos con centros de investigación.
En la segunda convocatoria los retos se centraron en la seguridad del dato y en el cumplimiento normativo y la certificación. Las soluciones propuestas por esta empresa fueron dos: CONFÍA y SECAP respectivamente. La primera sirve “para prevenir el uso malicioso a partir de herramientas de detección de datos sesgados, erróneos o fraudulentos”; la segunda, “es un sistema de evaluación y cumplimiento normativo en la Administración Pública”.
Por último, en la tercera convocatoria INCIBE pedía soluciones para la ciberseguridad en el vehículo conectado, a lo que Treelogic ayudó con SEVECO con un kit de seguridad para los mismos.
En el evento estuvo presente el director general de Cluster TIC Asturias, Enrique Jáimez, para quien la compra pública es importante porque “se trata de productos que no están en el mercado”. Para él era muy necesario “que hubiera en Asturias un grupo especializado en la seguridad de la información”.
Desde su punto de vista, la apuesta por los proyectos asturianos ha sido de gran relevancia por el hecho de que “tenemos un sector TIC muy potente, somos los cuartos en España”.
Próximos presupuestos para la IA, la Oficina del Dato y la Seguridad
Al encuentro acudió también el director general de Estrategia Digital e Inteligencia Artificial en el gobierno del Principado, Javier Fernández, quien quiso resaltar el éxito de las empresas asturianas y el impacto de las TIC a nivel nacional puesto que eso hace a la región “ser referente” en otras comunidades como País Vasco o Navarra.
La idea de Treelogic basada en el dato, dijo, “está muy alineada a la estrategia en la Administración porque permite ganar eficiencia y agilidad”.
Fernández aprovechó para presentar el presupuesto para el próximo año: “Se destinan 96.600.000 euros, de los cuales 0.7 se destinarán a la Inteligencia Artificial, 1.400.000 a la Oficina del Dato y casi dos millones a la seguridad, de los cuales se invertirá uno”.