Queríamos saber más sobre biotecnología y en qué posición se encuentra Asturias con respecto a este ámbito, así que nos pusimos en contacto con BioAsturias, la asociación de empresas biotecnológicas y biosanitarias del Principado para hablar con su presidente, Pablo Fanjul. ¿Qué sectores abarca la asociación? ¿Qué tendencias emergentes están influyendo? ¿A qué retos se enfrenta la región en este ámbito y qué oportunidades están por surgir? Estas y otras cuestiones son resueltas por Fanjul en una entrevista optimista y esperanzadora cuando menos.
¿Qué es BioAsturias? ¿Cuál es su objetivo y qué beneficios reciben las empresas asociadas?
BioAsturias es la asociación de empresas biotecnológicas y biosanitarias del Principado; empresas que diseñan y desarrollan producto propio y que no incluye a las sanitarias puramente asistenciales. El principal objetivo de la asociación es agrupar a todos los agentes que participan en el sector, darle visibilidad ante la sociedad asturiana, actuar de interlocutora con la administración y generar negocio a través de colaboraciones y sinergias entre los asociados.
¿Cómo concibes el panorama biotecnológico de Asturias?
A nivel empresarial creo que tenemos un conjunto de empresas biotecnológicas creciente, intensivas en I+D y en muchos casos nacidas de centros de generación de conocimiento como serían la Universidad de Oviedo, la FINBA o centros del CSIC. La mayoría de las empresas son de pequeño tamaño, muy especializadas y están en fase de crecimiento. Adicionalmente, el número de empresas que directa o indirectamente trabajan en el ámbito de la biotecnología también está en claro aumento. Pero si nos comparamos con otras comunidades autónomas carecemos de grandes empresas tractoras que pudieran alimentar ese tejido de pymes innovadoras.
¿Qué sectores predominan en la asociación?
Principalmente tenemos empresas del ámbito sanitario como Termosalud, Microviable, Ortoibérica o Dreamgenics; empresas con actividad en área cosmética (Nanovex, Imstant o Propharex); agroalimentarias, como Neoalgae; y otras que trabajan con tecnologías de la información y comunicación, principalmente con datos del sector salud, como Recog, Up Intelligence o Tesis.
El resto diríamos que son transversales a los diferentes sectores y con una aproximación tecnológica.
¿Qué proyectos habéis estado desarrollando con el ánimo de promover la biotecnología de la región?
Durante este último año se ha colaborado intensamente con el Ayuntamiento de Oviedo y la Universidad organizando conferencias y jornadas de diseminación en el Vivero de Ciencias de la Salud; se ha participado junto con el CEEI en el programa de formación Acelera Startups elaborando sesiones de formación a emprendedores; y también cabe resaltar la colaboración con la Agencia Sekuens, la Cámara de Comercio y el Ayuntamiento de Oviedo para la consecución de la Bioincubadora de Alta Tecnología a ejecutar próximamente sobre la base del Vivarium (Vivero de Ciencias de la Salud), junto al HUCA.
¿Qué papel juega la Administración Pública en el desarrollo del sector?
La Administración local y regional creen en las posibilidades de crecimiento del sector, un sector que, hemos de recordar, emplea a personal de alta cualificación (con un gran porcentaje de doctores en sus plantillas), intensivo en actividades de I+D, con un porcentaje de mujeres investigadoras superior a la media y que, no olvidemos, genera servicios y productos de alto valor añadido y elevado impacto para los usuarios y/o consumidores. Estamos hablando de alimentos, fármacos, productos y servicios de diagnóstico, terapias, etc. Es por ello que la Administración de la mano de las empresas y de BioAsturias está trabajando para favorecer el crecimiento de las empresas, su internacionalización y el trabajo en red.
¿Existen iniciativas para fomentar la formación en biotecnología en la región?
La mayor parte de la formación en biotecnología de la región recae sobre la Universidad de Oviedo a nivel de grados y máster. Si consideramos los programas de doctorado como formación ya hemos de ampliar esta labor a la FINBA y a algunos de los centros dependientes del CSIC que están instalados en la región. A nivel privado tenemos casos de doctorados industriales y de estancias post-doctorales en empresas que serían la última etapa de este proceso formativo en biotecnología.
¿Qué tecnologías o tendencias emergentes están siendo más influyentes en el sector?
La Inteligencia Artificial, como en todas las áreas de conocimiento, es la tendencia emergente que tendrá un mayor impacto en el campo de la biotecnología. Su aplicación al diseño de nuevos fármacos, terapias personalizadas o herramientas de diagnóstico generará grandes avances durante la próxima década.
¿Cuáles son los mayores retos que enfrentan las empresas biotecnológicas en Asturias actualmente?
Las empresas biotecnológicas requieren de largos procesos de investigación y desarrollo hasta que son capaces de introducir sus productos y servicios en el mercado. Adicionalmente, la mayoría de los mercados tienen barreras regulatorias de entrada que son de obligado cumplimiento. De aquí se deriva que algunos de los retos habituales en el sector sean: conseguir financiación a medio - largo plazo, por lo que es necesario tener paciencia con las inversiones en biotecnología; la involucración de inversores especializados que conozcan y entiendan estos tiempos; y una correcta evaluación de los requisitos regulatorios para la comercialización de los productos desde etapas tempranas o desde el propio nacimiento de la sociedad.
Además, estas empresas requieren personal con alta cualificación que en la mayoría de los casos no es fácil de encontrar. Ya por último, y desde el punto de vista de las infraestructuras requeridas para el desarrollo de la actividad, la disponibilidad de equipamiento técnico muy especializado en Asturias es escaso hasta la fecha, aunque la nueva bioincubadora de Oviedo viene a cubrir esta necesidad.
¿Qué oportunidades podría brindar este sector en los próximos años?
Hay grandes oportunidades para inversores ya que podrían participar en proyectos altamente innovadores que pueden generar un importante retorno de la inversión en el largo plazo. Existen oportunidades para consolidar en la región un sector pujante y creciente con profesionales de alta cualificación ofreciendo oportunidades para los egresados de la Universidad de Oviedo para que puedan desarrollarse profesionalmente en la región. Ya por último, las mejores oportunidades serán para nosotros mismos como consumidores, como usuarios, ya que tendremos acceso a mejores tratamientos, a mejores diagnósticos precoces, a cosméticos innovadores o a nuevos alimentos funcionales con efectos beneficiosos para la salud.