La computación cuántica incluye áreas tecnológicas como la simulación, la computación, la ciberseguridad y criptografía, la sensórica y la algorítmica; lo que hace que su aplicación pueda realizarse asectores muy variados como el farmacéutico, el automovilístico, el aeronáutico o el financiero. Los ordenadores cuánticos son computadores que rompen con todas las reglas de la informática actual ya que se basan en la mecánica cuántica y son capaces de procesar y realizar cálculos de una envergadura infinitamente mayor a los ordenadores que conocemos actualmente.
Actualmente, el acceso a ordenadores cuánticos, como los desarrollados por Google, IBM o Microsoft, es muy costoso y difícil, debido a que existen pocos computadores de estas características en el mundo y están muy solicitados. CTIC, como centro especializado en tecnologías habilitadoras de la transformación digital, ha decidido ir un paso más allá y ha reforzado su línea de investigación en Computación Cuántica a través de la adquisición de ISAAC.
ISAAC (Infraestructura Avanzada para la Simulación en Computación Cuántica) es una computadora de altísimas prestaciones que permite simular el comportamiento de una ordenador cuántico real de 38 qbits, haciendo posible a empresas e investigadores españoles y europeos probar y validar sus algoritmos de cálculos complejos, antes de acceder con los mismos a ordenadores cuánticos reales. Con la incorporación de ISAAC al equipo de trabajo, CTIC se convierte en el centro tecnológico español con mayor capacidad de simulación en computación cuántica y en uno de los más avanzados a nivel europeo.
La adquisición de este equipamiento avanzado ha sido posible gracias al apoyo económico recibido del Fondo Europeo de Desarrollo Regional y del Gobierno del Principado de Asturias, a través del Programa Asturias de apoyo a los Centros Tecnológicos. El proceso de licitación pública ha sido ganado por SEIDOR, grupo de referencia a nivel nacional en el suministro de infraestructuras tecnológicas y equipamientos para la supercomputación.
Fuente: Fedit