“La calidad y la adaptabilidad son nuestras señas de identidad”
"En nuestro caso, si hablamos de innovación tenemos que hablar de inversión en maquinaria. Se hace imprescindible trabajar con máquinas actuales, dinámicas e intuitivas".
Eduardo Naves y Massimo de Grada son socios fundadores de Talleres Edima, una empresa asturiana fundada en 2003 dedicada al mecanizado de piezas para automoción, trenes de laminación, escaleras mecánicas, pasarelas, jaulas de minas, placas solares. En estos casi 20 años, han sido capaces de construir un negocio compacto que emplea a 33 profesionales y factura 3 millones de euros.
Quédense con una palabra para definir Talleres Edima: calidad, innovación o cultura ¿Por qué?
Calidad y versatilidad. La calidad es fundamental para trabajar con los clientes que tenemos ya que nos requieren productos con especificaciones muy concretas. Además, tenemos la capacidad de adaptarnos muy rápido a las necesidades de nuestros clientes. Tenemos turnos las 24 horas del día, esto nos proporciona una gran agilidad y una capacidad de respuesta ante imprevistos o pedidos de última hora bastante destacable.
¿Cuáles son los principales retos que ha superado la compañía en estos casi 20 años?
El principal reto ha sido superar las diferentes crisis económicas que hemos vivido, de las cuales, nos hemos conseguido salvar adaptándonos a las necesidades de cada momento. Sin duda, este ha sido el principal reto. Por supuesto, el día a día está lleno de retos que nos ponen nuestros clientes que solucionamos gracias a nuestra rápida adaptación a los requisitos y proyectos.
Se dice que de todas las crisis surgen oportunidades, ¿han detectado alguna?
La principal oportunidad es que muchos competidores desaparecen. Si tú consigues sobrevivir, ese trabajo que antes desarrollaban otros, ahora lo pasará a ejecutar tu empresa. En la actualidad, están surgiendo grandes oportunidades en el sector eólico pero no creo que sea causa de crisis pasadas, sino a la evolución lógica del sector energético hacia un mundo más sostenible. Para nosotros, las empresas del sector eólico son el motor. Cerca del 80% de las horas trabajadas están destinadas a este ámbito de actuación.
¿Qué papel juega la innovación en el crecimiento de la compañía?
En nuestro caso, si hablamos de innovación tenemos que hablar de inversión en maquinaria. Se hace imprescindible trabajar con máquinas actuales, dinámicas e intuitivas. Por otro lado, estamos tratando de ponernos al día con todo lo que tiene que ver con la transformación digital y la digitalización de los procesos. Recientemente, hemos integrado un nuevo software de gestión y programación. En definitiva, vamos adaptándonos a las necesidades que surgen.
No hay innovación sin talento... ¿Tienen problemas para cubrir puestos de trabajo? ¿Cuáles son los perfiles profesionales más demandados?
Sí, nosotros no crecemos más debido a que no encontramos mano de obra. Demandamos fresadores y torneros pero no los encontramos. Son trabajos con mucha estabilidad, pero no hay profesionales, y los que hay tienen nociones muy escasas por lo que necesitamos formarlos. Lo cierto es que podríamos tener más carga de trabajo pero eso implicaría invertir en maquinaria que alguien tiene que manejar, y no hay quién lo haga.
La mayoría de sus clientes están en Asturias o en el territorio nacional, ¿tienen pensado abrirse a mercados internacionales?
De momento estamos cómodos con clientes asturianos que nos proporcionan una carga de trabajo estable y duradera, así que de momento no nos ha hecho falta internacionalizarnos. Es algo que nos hemos planteado pero no podemos asumir más proyectos ni encargos con el personal, maquinaria e instalaciones que tenemos.
Para finalizar, ¿cuáles son los próximos retos de la compañía?
El principal reto y objetivo es mantener facturación y empleo, tener estabilidad y una cierta tranquilidad de aquí a 10 años que es el tiempo que nos queda a mi socio y a mí hasta que llegue otra generación. A partir de ahí, ellos decidirán el rumbo que toma Talleres Edima.