La biofábrica de Ence en Navia retoma la producción tras implantar con éxito el proyecto de mejora de eficiencia “Navia 80”

La biofábrica de Ence en Navia ha retomado su actividad habitual, la producción de pasta de celulosa y la generación de energía renovable, una vez finalizada la parada necesaria para implantar el proyecto de mejora de eficiencia y aumento de capacidad denominado “Navia 80”.

Las operaciones enmarcadas dentro de la parada, que se inició a comienzos del mes de octubre, se desarrollaron dentro de los planes y tiempos establecidos por la compañía. La implantación de los nuevos equipos y las modernas tecnologías se ha ejecutado de manera exitosa, gracias al desempeño conjunto de los empleados de Ence y de las diferentes empresas implicadas en el proyecto. Las labores de arranque de la planta han culminado el proceso.

El objetivo de “Navia 80” ha sido obtener una mejora en la práctica totalidad de los procesos industriales de la planta, gracias a una inversión superior a los 113 millones de euros. Se ha aumentado la eficiencia de la biofábrica, al mismo tiempo que se ha mejorado su comportamiento medioambiental de manera notable. De hecho, 35 millones se han destinado, exclusivamente, a reducir y minimizar los impactos de las instalaciones en el entorno.

En este ámbito destacan la optimización del consumo de agua y la mejora de la calidad del efluente, así como la erradicación de olores y la minimización de ruidos. Todo ello se debe a la aplicación en la planta naviega de las más modernas tecnologías disponibles en el sector de la producción de pasta de papel.

Las cifras de esta fase final del proyecto “Navia 80” dejan constancia de la magnitud del proyecto. Se han realizado 340.000 horas de trabajo. Durante más de un mes, en la biofábrica de Navia han trabajado, de media, unos 1.400 contratistas diarios. El día de mayor ocupación en planta, el 10 de octubre, se registraron 2.043 personas en la planta, sumando empleados Ence y de empresas colaboradoras. En conjunto, han sido 185 firmas las que han participado en el proyecto, que han estado perfectamente coordinadas en materia de seguridad y respeto al medio ambiente, prioridades estratégicas de Ence – Energía y Celulosa, logrando resultados muy satisfactorios.

La biofábrica centrará ahora sus esfuerzos en continuar y fortalecer su producción de pasta de celulosa de alta calidad, que se exporta en su mayor parte al continente europeo, así como energía, con el objetivo de seguir creando riqueza y favoreciendo la actividad económica en su entorno.